El Govern de la Generalitat encabezado por el irresponsable Quim Torra es una máquina de derrochar el dinero de los contribuyentes.
Este sábado los compañeros de El Confidencial nos cuentan un nuevo caso que además indigna sobremanera por el trato despectivo que siempre se le dedica desde el Govern y sus satélites al Ejército y la Guardia Civil.
En plena pandemia y tras vilipendiar la ayuda de la Guardia Civil y de la Unidad Militar de Emergencias el Govern compró 27 puestos de campaña hinchables, despreciando los ofrecidos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El 16 de abril y valiéndose del decreto de alarma, inmediatamente después de obligar a cerrar el centro en Sant Andreu de la Barca preparado por el Ejército, el gerente del SEM, Antoni Encinas, adjudicaba a dedo un contrato a la compañía Dropscom Studio para la compra de 25 puestos médicos avanzados (PMA) del modelo Premium 35. El precio de cada uno de estos puestos se eleva a los 20.000 euros.
Ese mismo día el Servicio de Emergencias Médicas compraba otros dos puestos hinchables, más grandes que los anteriores y con un precio mucho más elevado: 30.000 euros cada uno cargado por supuesto al erario público y comprados en la misma empresa.
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